Más de 100 mujeres denuncian presunto fraude por parte de clínica estética Lanemex

De acuerdo con los testimonios, la clínica ofrecía tratamientos faciales y corporales con costos que iban de los 8 mil hasta los 40 mil pesos


Al menos 100 mujeres han denunciado ser víctimas de fraude por parte de la clínica estética Lanemex, la cual operaba en centros comerciales como Parque Delta y Parque Toreo, y que recientemente cerró sus sucursales sin previo aviso, según relataron varias afectadas en redes sociales y ante autoridades capitalinas.

De acuerdo con los testimonios, la clínica ofrecía tratamientos faciales y corporales con costos que iban de los 8 mil hasta los 40 mil pesos, atrayendo a clientes directamente en los pasillos de las plazas comerciales. En algunos casos, las personas recibían una o dos sesiones como parte del proceso de captación, aunque señalan que los servicios no destacaban en calidad, higiene o atención.

Una de las denunciantes, Zeltzin Gutiérrez, explicó en su cuenta de Instagram que, tras el cierre repentino de las sucursales, en los locales únicamente se colocaron avisos que indicaban una supuesta remodelación. Sin embargo, al consultar directamente con la administración de Parque Delta, se les informó que el contrato de arrendamiento había concluido y que la empresa se había retirado.

"Somos más de 100 mujeres estafadas. Estamos recolectando facturas para estimar el monto del fraude, que ya supera el millón de pesos", declaró Gutiérrez en redes.

Las personas afectadas presentaron una denuncia conjunta ante la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México, específicamente en la Coordinación Territorial BJ3, donde aportaron nombres de presuntos responsables y documentación de los pagos realizados.

Además de las denuncias por parte de clientas, también han surgido señalamientos laborales por parte de exempleadas. Karen Robles, quien trabajó en la sucursal de Parque Toreo, denunció a través de redes sociales haber sido víctima de violaciones a sus derechos laborales, incluyendo jornadas prolongadas, falta de pagos, carencia de seguridad social y condiciones de trabajo precarias.

"No me daban ni tiempo para comer o ir al baño. Pedía insumos y apoyo, pero no me hacían caso. Me fui, y poco después me enteré que ya habían cerrado", relató Robles.

Hasta el momento, Lanemex no ha emitido ninguna postura pública sobre los señalamientos. Las autoridades ya investigan el caso y no se descarta la posible comisión de delitos de fraude y abuso de confianza.